"Hechos que merecen palos"

Hay hechos que suceden en contra de la lógica común del ser humano.
Hay situaciones que no necesitan ser advertidas por asesores de una
materia en específico para que no sucedan. Este hecho que les voy a
describir, como dijera un compañero, merecen palos.
Y no voy a ser crudo como quien profirió semejante sugerencia a
quienes cometen hechos que se escapan del raciocinio del ser humano.
En la Llamada Playa de Tinito, esa exótica playa que tenemos aquí en
Chivirico, han resistido a los embates marinos y hasta la depredación
del ser humano en busca de leña como combustible hermosos arbusto de
Uvas caletas que siempre han distinguido esta costa. Ahora esos
arbustos de uvas caletas están siendo amenazados por personas
inescrupulosas que amontonan capaz vegetales secas debajo de ellos y
le prenden candela para que el calor de la combustión las vaya
eliminando, las extinga de raíz.
Pregunto yo. Qué le habrá hecho esas plantas de Uvas caletas a esas
personas. Les habrá negado la sombra en un lugar donde los rayos del
sol casi queman al ser humano. Esas matas de Uvas caletas que murieron
ya, que están ahí secas a la vista de todo el mundo habrán ofendido a
alguien por estar en un lugar donde lograr un árbol en esta costa es
como pedir un deseo casi inconquistable por la escases de lluvias que
experimentamos hoy.
Si esas plantas pudieran hablar y asistir a una fiscalía, a un
tribunal, a un cuerpo de inspectores forestales o guardia forestales,
dirían casi agonizantes. ¡Ustedes me van a dejar morir así de fácil y
no van a hacer nada con los responsables del hecho. Ustedes van a
justificar semejante Barbaridad con decir que quienes la cometieron
son personas falta de juicio que no conocían las consecuencias del
hecho. ¿La ley podrá exonerarlo de responsabilidad?.
Lo más triste del hecho es que el sábado pasado un vecino de
Chivirico, con conocimiento de Zootecnia, técnico en agronomía me
expresó que las plantas cuando reciben influencia excesiva de calor
entran en fiebre continua y mueren, se produce un proceso irreversible
que nadie la salva.
Compañeros, estas cuestiones que denotan falta de sentido común deben
preocuparnos a todos. Resultan hechos que en los peores de los casos
pudieran dársele una lectura nada bien intencionado.
A veces en medio de tantas situaciones agresivas como la falta de agua
potable en barrios de nuestro municipio, nos concentramos en esos
problemas mayores que la muerte de un árbol, dos árbol, tres arboles
por negligencia del ser humano no nos resultan llamativas. Pero es que
siempre, por ley de nuestra sociedad, existirán los problemas grandes,
medianos y pequeños.
Sucede que un día, ese que hoy es pequeño, mañana será grande y de
seguro, cuando nos esté envolviendo, la vida nos demostrará que no
fuimos lo previsor posible para evitar nos diera el macetazo mortal.
Les pido encarecidamente a las autoridades competentes. Con todas
hablé directamente ayer con sus máximos representantes. Por favor,
eviten sigan matando arboles cerca de la costa.

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