martes, 1 de enero de 2013

Las cosas por la cual querer mucho más a Guamà.

Las cosas por la cual querer mucho más a Guamà.

A veces no somos capaces de valorar en su justa magnitud las cosas
buenas que nos rodean y, un tanto en gesto de desaprobación,
criticamos las manchas que envuelven nuestras vidas.
Ninguna obra es perfecta. Pero siempre tiene lados hermosos que
debemos poner en alto como compensación a las arrugas que pretenden
empañarla.
Ayer, en mis acostumbradas incursiones en la red de Internet, muchos
colaboradores guamenses que cumplen misión en el extranjero me
preguntaban que tal el fin de año por acà. Le dije que este año vi
mucha màs familias reunidas en la cena que en otras ocasiones. No
pocos acà en Chivirico tuvieron la opinión que en barrios como Las
Calabazas, La Gasolina, El mincin, la Planta del frio, El caserío, los
Cangrejitos, hubo un predominio del olor a carne de cerdo azado. Una
persona en gesto de satisfacción me dijo: Benigno, yo pense que con
las penurias que dejò Sandy iba a ver menos familias disfrutando pero
sucediò lo contrario. Donde quiera tu veias un humo blanco que
indicaba que alli estaban azando un puerco, eso es lindo.
Pero también vi en la plaza 26 de Julio casi un pueblo completo
esperando el nuevo año.
Algunos prefirieron esperarlo en casa pero ahora la tendencia es cenar
temprano y salir a la calle a coger la noche con su frescor y saludar
a quienes veamos se merezcan el tradicional ?Usted sabe lo que le
deseo, mucha paz, prosperidad, que todo se le haga camino para el bien
y que lo malo quede atràs?.
El abrazo, el brindis, el apretón de manos. La emoción de haber vivido
un año mas en esta carrera del tiempo que nos impone el destino.
Hubo una joven que esta en Venezuela que me dijo: Benigno, aquí
comimos bien pero tu sabes que sin la familia al lado no es nada.
Saludame a mi Negro por allá. Yuraimis García, una enfermera que
cumple mision en Venezuiela me pidió con Nostalgia que le saludara a
su gente de aca.
Otra fue Maria Ruano, quien fue económica de la Empresa del Comercio
en Guamà y hoy vive en Los Estados Unidos. Me dijo: Benigno le hecho
mucho menos a mi clima de mi patria. Aquí hay un frio que pa què. La
comida se te congela de ponerla en la mesa.
Otro fue Marcial Rodriguez quien vive en Los Estados Unidos y cada vez
que ve a través de Internet a su gente de la Calabaza me pide de
corazón que le salude a su gente de su pueblo querido. Ellos lo dicen
con toda la sinceridad del Mundo. Hace unos días puse una foto donde
se veía a Pipi, el motorista de la emisora y, el propia Marcial puso
un pie de opinión que decía. Salúdame a Pipi, el mejor pintor de mi
pueblo querido.
Pero hay que ver còmo siguen las fotos de su pueblo. Cuando puse
imágenes de los destrozos de Sandy en Aserradero me salio Ramon Danger
quien esta en Angola, salio también Efrahin Corrales el medico que
cumple misión en San Vicente Islas Granadinas. Y ellos emitían
opiniones con un sentido de pertenencia a su pueblo que emocionaba en
saber que aunque pobres aca, la gente quiere a su pueblo. Lo ama, se
lo digo con toda la propiedad que me asiste. Y eso no es patriotismo
solo, es algo más, es devoción.
Estas cosas asi me llenan de espirito en querer y luchar más por mi
pueblo. Cuando usted ve que alguien de aquí se compra un auto, un
camión, e incorpora un articulo mas a su bienestar personal, se da
cuentas que nuestra tierra crece, se hace mas importante y de esa
manera los problemas son menores.
Estas son las cosas por la cual todos debemos querer mucho mas a Guama.

LA GENTE TIENE ROPAS.

LA GENTE TIENE ROPAS.

Hay una canción de Candido Fabrè que en uno de sus estribillos resa
que para estar en la Habana hay que ser especulador. En verdad el
músico tal vez hizo esa afirmación porque vista hace fè y en ocasiones
hay que aparentar una postura económica que hale mayor cantidad de
personas a que le proponga negocios y se le acerque con mejores ánimos.
Una mujer, ya mayor, cuando yo era pequeño, la escuché dar el criterio
que ella cuando salía a la calle se ponía lo mejor en vestuarios para
dar una imagen de poder económico, eso le traía suerte.
A los jóvenes que los fines de semana asisten a las noches culturales,
usted los ve que sacan para esa ocasión, como decimos en familia, los
mejores trapitos con el argumento expreso: ¡Pero cuando tu vas a lucir
algo si aquí en Chivirico no hay otra ocasión mejor que esa. Para
presumir, para que te valoren!.
Ellos tiene razón al expresar ese criterio. Pero además, he visto que
la calidad de vida de nuestro pueblo cada día es mayor. Y sin lugar a
dudas, un indicador que muestra si se avanza o no es el vestuario que
portan muchos jóvenes. Le dije hace unos dias a un amigo de mi
generación, ya supera los cuarenta y cinco años, Compay, tu viste la
ropa que se votan esos muchachos. El me contestó: Benigno, eso es
cuento, fíjate bien que casi siempre van con el mismo trapo. Lo que
sucede es que tu no vas casi a las noches de los sabados pero de que
repiten y solo tienen una o dos muditas de ropa eso es cierto. Me echè
a reír y le dije como cariñosamente le digo a muchos en tono familiar.
¡Duro, eso que te digo no es cuento, aquí se viste como en las
grandes ciudades y cuidao. La gente de aquí ha adquirido cultura del
vestir. Usted los ve que bajan taqueao pero lo lindo, echan en su
cartera un par de sandalias para cuando terminan, se quitan los
tacones alto y carretera monte adentro. No se rian que eso es asi.
Pero de que sacan Adidas de ocheinta dólares, Jines de cien, jejeje,
lo sacan.
Claro, no todos alcanzan esa especulación y se contentan en contemplar
el espectáculo. ¡Que, que quede claro!, no los critico, lo hago con la
sana intención de valorar un fenómeno cultural que está muy ligado al
vestuario y que invito al sectorial de cultura haga algun día un
evento en el que se estimule el buen vestir a partir de estas
potencialidades no explotada institucionalmente. La gente tiene ropas.