poblacionales del municipio Guamá ante intensas precipitaciones
lluviosas se hacen mucho más evidente para estos días de mayo cuando
las crecidas de los ríos pudiera seguir cobrando espacio que no
pertenece a su caudal natural.
En Uvero y Chivirico el año anterior sus habitantes sufrieron la
envestida de los ríos que bajan de las montañas y ahora aclaman porque
se les canalice a tiempo el recorrido del mismo para cuando comience
la temporada ciclónica "poder tener un respiro de que la posibilidad
de que las aguas alcance las viviendas sean mínimas".
La defensa civil en apoyo del gobierno local incurren en importantes
erogaciones económicas para asumir las labores de reducción de
vulnerabilidades.
En la instantánea pueden apreciar cómo el cauce del rio de Las
Calabazas en Chivirico está apenas a treinta metros de las
edificaciones y principal centro Urbano de esta zona. Y, aunque se
disponen de algunos equipos pesados para el movimiento de tierra, la
tarea exige otros de mayor envergadura pues la complejidad del terreno
lo demanda.
En Uvero las piedras "Chinas pelonas" que sirven de suelo del rio casi
como promedio en su generalidad sobrepasan los treinta centímetros de
diámetros y no son pocas las que sobrepasan el metro de altura. ¡Qué
tractor de cuchilla tamaño normal puede resistir al menos dos jornadas
de ocho horas de labor!. Es la expresión de solicitud de quienes,
conocedores de estos agentes agresivos, aclaman por equipamientos de
mejor factibilidad para esta misión.
Texto y Foto: Benigno Rodriguez Torres.
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