Guamá está considerado por la Defensa civil en Cuba no de los
territorios de mayor vulnerabilidad a los efectos negativos de
fenómenos meteorológicos. Uno de las amenazas frecuentes cada vez que
ocurren fuertes lluvias es el desprendimiento de tierra y piedra de
las pendientes montañosas que culminan casi en el mar.
Tramos como El de Babujal, La Uvita, La Bruja, Las Cuevas, Cotobelo,
Don Luis, Rio Grande, El Papayo, resultan vulnerables a que caigan a
la carretera no pocas piedras que en mucho de los casos alcanzan
superar el tamaño de un hombre de seis pies de altura. Hasta el
momento la casualidad no ha traído una desgracia para la vida de un
ser humano pero el peligro siempre está latente para quienes transitan
por esta vía. Hay quienes, novicios a su paso por aquí, han sido
capaces de emitir el criterio de estar delante de un pedazo de
meteorito caído del cielo porque no creen que pudieron haberse
precipitado desde las elevaciones montañosas casi perpendiculares en
sus pendientes.
La advertencia no es para que cunda el pánico en quienes decidan
escoger esta carretera como puente de acceso a la provincia Granma y
Santiago de Cuba por la costa Sur. Es a modo de que siempre, de manera
preventiva, se observe cuidadosamente cualquier envestida de estos
agentes naturales que casi siempre salen a la "palestra" cuando hay
fuertes lluvias.
El 30 de noviembre culmina la temporada ciclónica, aún está latente el
peligro. ¡tenga cuidado!.
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